Pensamiento 5: La tristeza

La tristeza,... siempre huyendo de ella....

La tristeza, vuelve a ser una emoción sana. Digo sana puesto que forma parte de la vida, no podremos esquivarla siempre, y nos va a ser necesaria para superar situaciones de duelo y pérdidas: un divorcio, la muerte de un ser querido, un despido....

Las sensaciones y síntomas corporales que conocemos de sobra, un nudo en la garganta o en el estómago, una sensación de hueco, una pesadez sobre los hombros, decaimiento, lágrimas, cansancio, son manifestaciones normales de la tristeza y tendremos que aprender a aceptarlas cuando estas aparecen, pero no dejar que se perpetúen. Hay un dicho - creo que hindú - que dice algo así como: deja que la tristeza planee sobre tu cabeza pero no dejes que anide en ella.

Cuando esta tristeza se vuelve crónica, cuando las sensaciones físicas se intensifican, cuando el sufrimiento emocional es cada vez más intenso y uno siente que ya no puede funcionar en su vida diaria, que ya no puede ir a trabajar, ni siquiera levantarse, entonces la tristeza ya no es tristeza sino depresión. 
Y  la depresión es una emoción insana que requiere intervención profesional puesto que se considera un trastorno.

Un compañero solía decir "lo normal es salir de una depresión" estoy de acuerdo y requiere tratamiento terapéutico y en muchos casos también farmacológico.